En una nueva jornada electoral desde la cual el Partido Demócrata elige al candidato que hará frente a Donald Trump el 3 de noviembre próximo, quien fuera vicepresidente durante las dos administraciones de Barack Obama volvió a obtener una contundente victoria.
Nuevo martes en los Estados Unidos donde el Partido Demócrata ya con solo tres candidatos (Joe Biden, Bernie Sanders y Tulsi Gabbard), aunque en verdad únicamente dos aspirantes (Biden y Sanders), parecería haberle otorgado al ex vicepresidente norteamericano buena parte de la candidatura demócrata de cara al 3 de noviembre.
Michigan y otros cinco Estados ( Missouri, Idaho, Dakota del Norte y Mississippi) votaron en una instancia potencialmente clave de la interna presidencial demócrata.
Joe Biden en remontada, terminó por afianzarse, Bernie Sanders, en cambio, no logró detener su caída y apunta al debate “mano a mano” del 15 de marzo con la necesidad de remontar con la palabra lo ocurrido en las urnas.
Si de los seis Estados en cuestión resalta el caso de Michigan es porque en parte otorga un número importante de delegados, pero además porque simbólicamente fue donde Sanders, pudo en el 2016 ganar el peso como para ser un desafiante serio hacia Hillary Clinton.
Si bien cada Estado parte de los Estados Unidos tiene sus propias reglas sobre los mecanismos de votación, así como la asignación de delegados, lo cierto es que la candidatura de formaliza en la Convención Nacional Demócrata.
Sobre un total de 3979 delegados, un candidato tiene que ganar al menos 1,991 delegados para ser nominado.
Es importante resaltar que a diferencia de la elección presidencial, en las internas demócratas ningún estado usa el sistema que otorga todos los delegados al ganador. Por el contrario, los delegados se dividen proporcionalmente al apoyo que recibió cada precandidato.
Entonces, ¿la suerte está echada para Biden y Sanders? No necesariamente. Desde lo matemático, Biden cuenta al momento (las mesas siguen escrutando votos) con un total de 823 delegados, en tanto que Sanders dispone de 663.
Osea que Sanders todavía no está eliminado matemáticamente, pero es difícil imaginar algún tipo de regreso en esta etapa de la carrera. Entre otras cosas por uno de los puntos que (de nuevo) nos deja Michigan.
La cómoda victoria de Biden en este distrito (supera el 50% de los votos) parece haber sido impulsada, en parte, por los votantes suburbanos, un grupo demográfico que, junto con los votantes negros, también ayudó a Biden a ganar el supermartes de la semana pasada y al momento está siendo esquivo para Sanders.
Próximas fechas a considerar:
- 12 de marzo: Caucus en las Islas Virgenes
- 14 de marzo: Caucus en Guam
- 15 de marzo: Debate Biden – Sanders (Phoenix, Arizona)
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